Entre sus hitos está la creación, en 1.999, de la Reserva Voluntaria. Hace ya 18 años.
Con el Real Decreto 1558/1977 se aprobó, entre otras cuestiones, la reestructuración del Ministerio de Defensa, integrando en el mismo todos los Organismos y unidades de los Ministerios del Ejército, Marina y del Aire, siendo a partir de entonces el ministerio encargado de la ordenación y coordinación de la política general del Gobierno en cuanto se refiere a la Defensa Nacional, así como de la ejecución de la política militar correspondiente.
Para conmemorar la efeméride el Ministerio ha editado un documento donde se resaltan 40 puntos clave acaecidos a lo largo de estos 40 años; un punto por cada año cumplido. Todos ellos han sido de gran calado para las Fuerzas Armadas (FAS), destacando sobre los demás la entrada de España en la OTAN, la suspensión del servicio militar con la profesionalización de las Fuerzas Armadas y la entrada de la mujer en la vida militar.
Sin quitar un ápice de importancia a los anteriores puntos, es objeto de estas líneas -y así lo queremos destacar- el que hace mención expresa a la creación de una figura nueva en las FAS, que es la de los Reservistas Voluntarios como fórmula aportación suplementaria de recursos humanos, es decir, como incorporación de personal civil a las Fuerzas Armadas. Se trata por tanto de civiles que aportan sus capacidades y especialidades profesionales y formativas durante ciertos períodos de tiempo al año y ello mediante la suscripción de un compromiso, de tres años renovable, al que se ha accedido previamente mediante el pertinente concurso público en convocatoria de plazas publicadas a tal efecto.
Esta figura, que fue aprobada mediante la Ley de Personal de las Fuerzas Armadas de 1999, se recoge también en el artículo 123.4 de la Ley de Carrera Militar del año 2007, indicando que su objeto es el de apoyar las actuaciones de las Fuerzas Armadas que van destinadas a preservar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos y también para prestar servicio en las unidades, centros y organismos del Ministerio de Defensa. Mediante el Decreto 383/2011 se aprobó el Reglamento específico que da pleno desarrollo a la figura del reservista de las Fuerzas Armadas españolas, en sus diferentes aspectos y modalidades.
Todo esto conlleva un cambio sustancial en la concepción de la aportación de recursos humanos a las FAS, pues se pasa de un servicio de leva general -o servicio militar obligatorio- a uno de militares profesionales, a los que se les añaden los civiles que acceden a la condición de reservistas de los ejércitos (Tierra, Mar, Aire y Cuerpos Comunes). Actualmente en torno a 4.500 españoles de ambos sexos mantienen el compromiso como reservistas disponibles, compaginando sus trabajos civiles con las activaciones anuales para prestar servicio en sus unidades, e incluso en ocasiones -cada vez más frecuentes- en misión o embarcados.
Y es que este concepto de reserva militar, clásico en nuestro entorno aliado, es algo novedoso para España. Como sistema entronca sus raíces en la doctrina OTAN, que quedó fijada en el NATO FRAMEWORK POLICY ON RESERVES (MC 441/1). Es evidente que la historia de nuestros socios OTAN y su participación en ambas guerras mundiales del siglo XX conllevó necesariamente que consolidaran una concepción muy clara de la necesidad de dotarse de unas fuerzas de reserva de forma permanente. Incluso los posteriores recortes en Defensa, acompañados de una general reducción de personal profesional, ha venido acompañada en los países de nuestro entorno de un refuerzo o aumento de las plantillas de personal reservista. Esto -en gran medida- no ha ocurrido en España, si bien sería motivo de otro artículo.
Una de las cuestiones que es desconocida para el público en general, e incluso para las Fuerzas Armadas regulares o profesionales, es la actividad de asistencia y representación en los foros aliados internacionales que realiza el colectivo de Reservistas Voluntarios. Vayan unas notas a continuación para dar debida razón de ello.
LA ACTIVIDAD INTERNACIONAL DE LOS RESERVISTAS VOLUNTARIOS DESDE EL PUNTO DE VISTA ASOCIATIVO. Una reseña sobre FORE y el Congreso de Verano de CIOR y CIOMR como ejemplo.
LXIX Congreso de Verano de la Confederación Interaliada de Oficiales Reservistas (CIOR) y Oficiales Médicos Reservistas (CIOMR). Ahora hace un año.
Este pasado mes de agosto se cumplió un año de la celebración del LXIX Congreso de Verano de la Confederación Interaliada de Oficiales Reservistas (CIOR) y Oficiales Médicos Reservistas (CIOMR) que tuvo lugar en Madrid.
Reconocidas por el Comité Militar (MC) de la OTAN, CIOR y CIOMR agrupan las asociaciones de reservistas de los países que pertenecen a la Alianza, de quien reciben apoyo y con quien colaboran para la mejora de las fuerzas de reserva de los países aliados. Aglutina a 34 estados asociados, los pertenecientes a la Alianza y otros de países de nuestro entorno aliado que han suscrito convenio. Son órganos consultivos de OTAN y están compuestos por Asociaciones Civiles de Oficiales Reservistas, cuya finalidad es promover la política OTAN en materia de fuerzas de reserva en sus respectivos países.
La organización que ostenta la representación de los reservistas españoles en estos foros es la Federación de Organizaciones de Reservistas de España -FORE-, federación que aglutina a asociaciones de reservistas voluntarios y que fue fundada en Madrid en el año 1992 bajo los auspicios del entonces JEMAD Almirante Martín Granizo. Así pues la representación española en la CIOR y la CIOMR está bajo su patrocinio. Dese que España se había incorporado a la OTAN se debían atender también estas cuestiones, siendo FORE la organización creada a tal fin.
En ese marco, del 2 al 6 de agosto de 2016 tuvo lugar en Madrid el Congreso anual de verano, íntegramente organizado y desarrollado por la FORE. Afrontar la organización del Congreso se trataba de todo un reto por dos motivos: el elevado número de delegaciones y de participantes de una parte; y el requerimiento del Ministerio de que, aun dando todo el apoyo institucional, el Congreso no debía suponer una carga económica para el Ministerio. Y así se hizo.
España solo había organizado dicho Congreso de Verano en una ocasión, en 2001, recordando además que en aquel momento fue con un coste final de más de 11 millones de las antiguas pesetas por lo que, volverlo a realizar en esta ocasión con una completamente diferente perspectiva económica, se trataba de todo un desafío. Qué decir tiene que en los últimos años son varios los países que han tenido que rechazar esa posibilidad por lo que suponía hacer frente a la organización de un congreso de esta índole en un entorno de restricciones presupuestarias tan severas como las que se han venido padeciendo, también en nuestros países aliados, y que a ninguno se nos escapa.
Todo y con ello España -de la mano de sus reservistas- decidió recoger el guante. Ya con los prolegómenos se recibió una excelente noticia, que elevó las ganas de afrontar con éxito el evento: SM el Rey Felipe IV aceptó la presidencia de honor del “LXIX Congreso de Verano de la CIOR-CIOMR MADRID 2016”, un gran orgullo para el colectivo reservista.
Todo estaba por hacer. Se difundió entre las más de 16 asociaciones de reservistas de las fuerzas armadas de toda España la llamada a participar, poniéndose manos a la obra. Un equipo de reservistas de todos los cuerpos y empleos se presentaron voluntarios para realizar las tareas que se les encomendasen a fin de conseguir lanzar el proyecto y ejecutarlo sin incidencias.
Finalmente, tras muchos meses de gran trabajo de coordinación de la FORE con el Ministerio de Defensa, el 2 de agosto de 2016 pudo comenzar el Congreso de manera oficial, con la Ceremonia de Inauguración a la que asistió como máxima autoridad militar el teniente general del Ejército del Aire Excmo. Sr. D. José María Orea Malo, Jefe del MALOG (Mando Logístico) y que se desarrolló en la lonja del Cuartel General del Ejército del Aire en Moncloa, en pleno centro de la capital. El general pudo pasar revista a la formación de reservistas compuesta por 24 delegaciones, de los países de Albania, Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Canadá, Dinamarca, Eslovenia, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Italia, Macedonia, Noruega, Países Bajos, Polonia, Reino Unido, República Checa, República de Sudáfrica, Suecia y Suiza. En total formaron 525 reservistas que allí se habían dado cita, de uniforme. Al acto le siguió una recepción en la que los asistentes pudieron departir amigablemente.
El congreso se articuló sobre la base de unas sesiones plenarias, las reuniones del Consejo de CIOR así como las de sus distintos comités y grupos de trabajo, celebrándose en paralelo el congreso de CIOMR, cuyas reuniones tuvieron lugar en la sede del CESEDEN. También se llevaron a cabo tanto las competiciones militares, como las actividades CIMEX (Ejercicios CIMIC), el taller YROW (Taller de Jóvenes Oficiales Reservistas), el taller CIOMR y el Symposium, aunque ya el día anterior se celebraron sesiones de trabajo y un Taller organizado por CIOMR sobre cuestiones médicas en las Fuerzas Armadas.
Si bien el Congreso empezó formalmente el 2 de agosto, la realidad es que ya desde el 28 de julio anterior fueron llegando los competidores de la MILCOMP, alojándose a tal fin en la Academia de Ingenieros del Ejército, en Hoyo de Manzanares, trasladándose diariamente a la base de la Brigada Paracaidista, en Paracuellos del Jarama, donde se realizaron tanto los entrenamientos como las competiciones militares en su pista militar e instalaciones anexas, como orientación, tiro y demás pruebas de este tipo.
También se tuvo previsto que del 30 de julio al 2 de agosto se desarrollaran los Ejercicios CIMIC (CIMEX), siendo que al finalizar los mismos sus participantes se incorporaron al resto de actividades previstas en el Congreso. Liderados hasta entonces por un Teniente coronel reservista de la British Army, los reservistas y personal civil no reservista inscrito, participaron en los ejercicios CIMIC.
El 3 de agosto tuvo lugar la jornada académica abierta al público, previa inscripción, en la que ponentes nacionales e internacionales abordaron cuestiones de relevancia en materia de seguridad y defensa, concretamente sobre la resiliencia. La jornada se desarrolló íntegramente en Auditórium del Hotel Meliá Castilla, lugar de alojamiento de la práctica totalidad de los asistentes.
El mismo 3 de agosto tuvo lugar un emotivo Acto de Homenaje a los Caídos, que se desarrolló en el acuartelamiento del Goloso, sede de la Brigada Acorazada Guadarrama XII, que fue seguido de un Vino Español de confraternización entre aliados.
El jueves 4 de agosto continuaron las sesiones de trabajo y el Consejo de CIOR, CIOMR, concluyendo al día siguiente. La Ceremonia de Clausura tuvo lugar el sábado 6 de agosto en el Auditórium del Hotel Meliá Castilla, que fue seguida de una comida, poniendo fin al Congreso la Cena de Gala que se celebró en el Club Deportivo Militar La Dehesa en las afueras de Madrid.
De este modo a lo largo de unos días Madrid se convirtió en el centro de la actividad de los reservistas de la OTAN y países aliados. Todo salió como estaba previsto, a satisfacción del Ministerio y con la sensación de los organizadores del deber cumplido. España, de nuevo, a la altura de lo que todos esperamos y deseamos; en este caso de la mano de su colectivo reservista.
Finalizar estas líneas reiterando el agradecimiento muy especial del colectivo reservista a las unidades que colaboraron de forma inestimable para que el congreso fuera una realidad: el Cuartel General del Ejercito del Aire, la Academia de Ingenieros, la Brigada Paracaidista, la Brigada Acorazada, el CESEDEN y el Club Deportivo Militar La Dehesa. Y al Ministerio de Defensa por su apoyo.
Autor:
Antonio DEUDERO MAYANS
Alférez de Navío (RV) Armada española
Vicepresidente de FORE y de la Asociación de Baleares ARIBAL
Fotos: Carlos Ezequiel SÁNCHEZ MORALES
Cabo 1º (RV) Ejército de Tierra
A continuación unas fotos del congreso:
